HABLAMOS DE ¿CRISIS DE VALORES?

Primeramente tenemos que poner en claro a que nos estamos refiriendo cuando hablamos de “Crisis de valores”. En nuestro entorno social solemos escuchar que los adolescentes y jóvenes ya no viven los valores, se dice que los valores se están perdiendo; este juicio es emitido erróneamente, pues, si nos referimos a la pérdida de los valores sería ambigua la afirmación, ya que el concepto de valores es abstracto, es un ideal, son entes intangibles , y como son entes intangibles no se pueden perder, los valores están encarnados en el ser mismo de la persona. Por lo tanto, no podemos hablar de pérdida de valores. Es así que, cuando hablamos de la “crisis de valores” se está refiriendo a que las expresiones humanas en cuanto a los valores se manifiesta de forma distinta a través de los tiempos, de tal manera que, cuando escuchamos que “ya no se viven los valores de antes” lo que en realidad sucede es que ya no de observan los mismos comportamientos que en las épocas anteriores, pero no se puede hablar que hayan desaparecido o ya no haya valores en los adolescentes y jóvenes.


Por lo tanto, cuando se habla de crisis de valores nos estamos refiriendo, no a la pérdida de valores, sino a la desvirtuación, manipulación y reducción del verdadero sentido y naturaleza de los valores; a la manipulación conceptual de los valores, creando un olvido de ellas, porque están opacados por los antivalores. Pues, hoy en día se quiere ver al amor como un simple deseo de placer, al mal como un bien, por ejemplo: Cuando un adolescente se ve amenazado por su compañero, responde con violencia como signo de justicia, de tal manera que la justicia está ensombrecido por la violencia, viendo la violencia como un bien. Es bien sabido que los valores llevan a perfeccionar a la persona y cuando es opacada por los antivalores la persona se va degradando, he aquí la crisis mayor.